Antiguamente, en la plaza del pueblo se amontonaba la chamiza
El fuego fue parte esencial de la religión nativa. Monseñor Silvio Haro habla sobre las fogatas que se encendían y se encienden en las comunidades del norte de Pichincha e Imbabura, sobre todo la víspera del 24 de Junio y dice que este fuego representaba al sol. Luego vinieron las fiestas católicas y se tomó este símbolo y se lo incorporó a la fiesta religiosa.
En Tabacundo, desde tiempos muy remotos, nos acordamos de la costumbre hermosa de la entrada y la quema de la chamiza. Hace algunos años, la comunidad que participaba en la traída de la chamiza, era la de Purhuantag; con semanas de anticipación, podaban las chilcas, los pencos secos y otras plantas nativas y les dejaban a la vera del camino para que se secaran. En las vísperas de los días de fiesta, acarreaban estas plantas secas, en guangos hasta el pueblo y se realizaba la quema de la chamiza.
Desde hace unos cinco años, se encargó este oficio al barrio El Tambo y lo hicieron bien. Acompañados de la banda de música, con las yuntas adelante, otros moradores cargados la chamiza en las espaldas y una buena cantidad en camionetas y camiones llegaban al final del desfile hacia el parque principal. Amontonaban a los costados y se quemaba en medio de la alegría de todos los acompañantes.
En esta fiesta, nuevamente la comunidad de Purhuantag va a participar en el acarreo de la chamiza, por esta profunda alegría, les agradecemos.
2.- Los juegos ancestrales
En la temporada de las fiestas de Noviembre, se realizaban algunos juegos ancestrales y se cocinaban ciertos platos típicos. El doctor Miguel Ángel Puga en su libro: De siglo a siglo, habla del juego de los cabes que se realizaba en tiempos pasados. Dice que se efectuaba en la plaza del pueblo, junto a la iglesia nueva que se estaba construyendo. Las competencias se hacían entre los jugadores de Tabacundo y los peregrinos.
Este juego nació por intercambio de los caminantes del norte con los pobladores de Tabacundo, que se realizaban sobre todo en las fiestas de la Virgen del Quinche y nuestra fiesta del 23 de Noviembre. No sabemos quién enseñó el juego, pero sabemos que tiene origen español. Hemos conocido que este juego se realiza en algún lugar de España. Lo que sabemos es que los trompos que utilizan los jugadores de Cotacachi, de San José de Minas y de Tabacundo son diferentes, en la forma y en el peso.
El juego de los cabes se realiza en una competencia entre varios grupos de jugadores que salen de un sitio central y por turno o de manera alternativa van haciendo bailar al trompo y golpeando a una «bola» de madera forrada de un metal y gana el equipo que llega más pronto a la meta.
Se han ido incorporando otras modalidades a los juegos, competencias del cabe más largo, cruzar ciertos obstáculos, etc.
En Tabacundo se han realizado siete campeonatos mundiales de cabes, haciendo referencia a que este juego es propio de estos sitios.
En la página electrónica de la Junta parroquial de San Antonio de Ibarra, se hace mención a este juego ancestral, pero en las visitas que se ha hecho a esta parroquia no se ha detectado la presencia de jugadores de los cabes.
(Tomado del Programa de Fiestas de Mama Nati 2013)